Costos de materiales desarticulan la industria de construcción de República Dominicana

República Dominicana.- Analizando las grandes demandas de los mercados internacionales a nivel mundial en la importación y exportación de los materiales de construcción, los precios de materiales de construcción, en la Republica Dominicana, se han incrementado hasta en un 85%, en comparación a los años anteriores. También existen aumentos en los materiales eléctricos, de plomería y de terminación, igualmente las pinturas y maderas preciosas, cerámicas, etc.
El significativo aumento del cemento de construcción, el acero y sus derivados, la grava, la arena, el hormigón y los blocks, entre otros, han provocado, en el mercado local, alzas escalonadas en los precios de apartamentos y viviendas unifamiliares, y proyectos de alta densidad, como son los complejos comerciales y turísticos.
En la República Dominicana, el cemento aumentó, entre Mayo y Junio de este mismo año, RD$20 y RD$30 y en la actualidad oscila entre los RD$235 y RD$250 la funda, con la posibilidad de seguir aumentando hasta $280 para finales del año. En tanto, el atado de varillas, que costaba en el mes de Mayo RD$54,000, ahora ha subido a RD$73,000. Esos aumentos hacen casi imposible que una persona de clase media pueda invertir en mejorar su casa, debido a que el quintal de varillas le cuesta entre los RD$2,750 y RD$3,300. Mirando el costo acelerado experimentado entre Mayo y Junio, el atado de barrilla podría llegar de RD$80,000 a RD$100,000 al finalizar el 2008. Por consiguiente, la varilla experimentaría un costo inalcanzable entre RD$3,600 y los RD$4,500 el quintal.
Lo mismo pasa con la grava y la arena. La arena Itabo subió de RD$650 a RD$700 y a RD$800 el metro cúbico. La grava pasó de RD$750 a RD$850 y RD$900. Según fuentes periodísticas, el aumento desmedido de estos productos es consecuencia directa de la disputa entre las compañías extractoras de grava y arena (granceras) y la Secretaría del Medio Ambiente por la extracción de esos materiales de los ríos dominicanos.
En tanto, el precio de los clavos de acero se incrementó de RD$25 a RD$40 la libra. Los blocks, que en Mayo del año pasado costaban RD$12 a $15, en Marzo de este año subió entre los RD$18 y $23, según la Asociación de Contratistas y Promotores de Viviendas (ACOPROVI). Todos estos precios pueden variar dependiendo de la distancia y el lugar de la obra, además del tipo de terminación apreciado en el diseño y en la construcción.
Todo esto ha provocado alzas en los costos de construcción de las viviendas en sentido general. Como consecuencia, en algunas zonas de la capital y ciudades en el interior del país, encontramos torres de apartamentos paralizadas por tiempo indefinido. Mientras que el sector de los pequeños y medianos constructores, y contratistas, es afectado por la gran desaceleración en el ritmo de construcción de viviendas a nivel nacional.
Este incremento de los precios de los materiales y de las viviendas también afecta a los compradores en su demanda de adquirir el inmueble, puesto que un apartamento o casa que acordaron comprar en una pre-venta de promoción o separación (llámese compra en plano) a un precio, ahora le hacen ajustes de precios al finalizar la obra y al querer pagar el inicial del inmueble. Eso resulta en que al cliente comprador de la vivienda termina costándole hasta el doble del precio tratado anteriormente con el contratista o la entidad bancaria.

Nuestra Visión:
La industria de la construcción, por años considerada el motor que más dinamiza la economía dominicana, comenzó a recibir los estragos de una crisis que empezó por el alza de los combustibles y sus derivados a partir del 2006. En los momentos actuales, esto se deja sentir con mayor intensidad en el alza de los precios de los insumos básicos de la construcción y en los artículos ferreteros.
Por otro lado, hemos visto que las entidades bancarias y financieras comenzaron a tomar medidas que afectan directamente a los promotores de viviendas y a pequeños constructores nacionales e internacionales con nuevas imposiciones financieras que limitan a los clientes potenciales con intenciones de comprar o vender su vivienda.
En adicción a eso, las Asociaciones de Ahorros y Préstamos y los Banco comerciales que tienen fondos para los financiamientos de viviendas aumentaron sus tasas de intereses de un 12%, en promedio, a un 18% -19%, como una manera de protección por la variante de los precios y la inestabilidad de la crisis económica actual.
Nosotros hemos tenido la experiencia de personas que han comenzado a construir su casa en un solar, que tienen desde hace varios años, y que hoy se encuentran frustradas al no poder darle terminación a su vivienda debido a dificultades financieras.
Ante semejante panorámica, creemos que buscándoles facilidades para que esos dueños puedan iniciar y terminar sus proyectos estaríamos garantizando la permanencia y desarrollo del interés en la compra y venta de bienes raíces de las clases media y baja en la República Dominicana. Por tanto, este es el momento para que empresas e instituciones relacionadas a la industria de la construcción hagan ofertas de financiamiento y costo de materiales que no pongan en peligro de sucumbir a los sectores de clase media y baja empeñados en construir o adquirir sus viviendas a precios accesibles.